Comprar una moto implica decisiones como la elección del tipo de marchas, es decir, si son automáticas o no. Si tienes este problema, en este artículo te vamos a explicar cómo utilizar las marchas de la moto.
Cuáles son los mandos de una moto
En el lado derecho de una moto, es decir, tanto en las manetas como en los pedales, encontramos los frenos. Por tanto, en la maneta derecha tenemos el freno delantero y en el pedal derecho el freno trasero. Este último es una palanca.
En la parte izquierda encontramos las marchas de la moto. El embrague se sitúa en la maneta y en el pie izquierdo los cambios de marchas de los que hablábamos. La colocación de estas es la siguiente: primera, punto muerto o N, segunda, tercera, cuarta y quinta.
La particularidad de una moto es que para meter primera debemos bajar el pie. Cuando lo subimos, antes de llegar a la segunda marcha, pasamos por el punto muerto. Después vendrían todas las demás marchas de la moto seguidas.
Cómo utilizar las marchas de la moto
Si tenemos el carné de conducir B, entender el funcionamiento nos resultará muy sencillo. En cualquier caso, conviene explicarlo porque se realiza a la inversa que en un coche. El embrague está en la mano y las marchas en los pies. No obstante, los tres elementos a accionar son los mismos: el acelerador, el embrague y la palanca de las marchas de la moto.
En primer lugar, tal y como hacemos con el coche, con la moto acelerada accionaremos el embrague con la mano izquierda. Al mismo tiempo soltamos el acelerador y seleccionamos la marcha que necesitemos. Debemos recordar que la primera marcha es hacia abajo, y las demás marchas de la moto hacia arriba tras el punto muerto.
A continuación soltamos despacito el embrague de la mano izquierda mientras aceleramos nuevamente con la derecha. Y así con todas las marchas de la moto. La dificultad aparece con el punto muerto o posición neutral. Al estar en medio, si no entrenamos bien el pie, a veces nos puede costar localizarlo.
Para saber cuándo cambiar las marchas de la moto observaremos las revoluciones y el ruido del motor. Si estamos en una marcha larga y las revoluciones caen, bajaremos una. Del mismo modo, si estamos en una marcha corta y las revoluciones suben con mucha rapidez, nos toca pasar a una más larga.
El truco del punto muerto o posición neutral
Hoy en día, para facilitar la conducción, el cuadro de instrumentos de muchas motos nos indica la marcha que estamos utilizando. Sin embargo, todas indican con una luz cuando el punto muerto está seleccionado.
Cuando accionamos la palanca con excesiva fuerza, pasaremos directamente de la primera a la segunda. Es conveniente practicar el tacto del pie izquierdo para localizar las marchas de la moto. Una vez que lo hayamos entrenado para moverlo con suavidad, encontraremos el punto muerto de forma instintiva. En cualquier caso, recuerda que la luz de la N aparecerá cuando estés ahí.
Por último, volviendo a las marchas de la moto, es posible saltarnos una y cambiar dos directamente. Hay que tener en cuenta que al reducir las revoluciones subirán bruscamente, por lo que debemos frenar todo lo que podamos antes. Y al avanzar las marchas, quizás el motor no tenga fuera suficiente.
Utilizar las marchas de la moto es bastante sencillo, solo hay que entrenar el pie y coordinar con las manos. En Mujeres Moteras tenemos también una categoría sobre formación. En ella encontrarás artículos interesantes sobre la conducción de una moto.
